25 septiembre, 2014

Ojo a Angrois con Catalá en Justicia


Con Catalá en Justicia  se podrían desactivar las posibles responsabilidades penales de las cúpulas directivas y políticas involucradas en el accidente de Angrois

Me río de los tecnócratas metidos a políticos y con poder político. Son los peores. El de la retranca gallega, no suele dar puntada sin hilo y sus razones tendrá para haber nombrado al nuevo ministro minutos después de haberle dado la patada  y la puñalada trapera a Gallardón. El defenestrado también se la devolvió bien devuelta por lo bajini en su rueda de prensa de despedida.

¿No es solidario el gobierno en sus decisiones?, ¿no es cierto que el anteproyecto fue aprobado por el gobierno en pleno?, ¿por qué no dimite el gobierno?, y visto lo visto ¿por qué no retira Rajoy el recurso planteado ante el Constitucional?, ¿por qué tanta prisa para retirar el proyecto estando el presidente con un pie en el estribo del avión para viajar a China y el Jefe de Estado en La ONU?, ¿a qué viene el peregrino argumento de  para qué aprobar una ley que va a ser derogada a los 5 minutos por otro gobierno?, ¿y el resto de leyes aprobadas por los decretos leyes del PP? Todos, despropósitos a que nos tiene acostumbrado este gobierno.

Pero, a lo que íbamos. La jugada del gallego nombrando al ex secretario de estado de infraestructuras de Fomento Rafael Catalá tiene otro alcance. Proteger y reventar desde dentro cualquier progreso en las posibles imputaciones penales como consecuencia del accidente del tren Alvia en Angrois en el verano de 2013.

El nombramiento de Catalá como ministro de Justicia garantiza tener a sus órdenes al fiscal general del Estado y por tanto a todo el aparato acusador, al tiempo que a buena parte de jueces partidarios que se sientan en las salas de las Audiencias Provinciales y los Tribunales Superiores de las autonomías.

Nada más y nada menos Catalá puede librar de algunas sentencias desagradables a los ex miembros del ADIF, a parte de las cúpulas de ADIF y Renfe, a gente de la Dirección General de Ferrocarriles, a los políticos que metieron las manazas en los proyectos y los plazos y dijeron inaugurar una línea dotada de los mejores sistemas de seguridad, que resultaron ser un fiasco. Para salvar a la ministra, ¿por qué no? Y, quizá a él mismo.

De ahí la denuncia y el desánimo, más que justificados de la Plataforma  de Víctimas del Alvia 04155 que ven como  el TSJ de la Coruña echaba abajo algunas imputaciones más que justificadas, se les ha apartado a un juez que se tomaba en serio la instrucción de la causa, se les ha vejado políticamente en el primer aniversario de la desgracia y ahora ven que un presunto implicado, con evidentes responsabilidades en el accidente, es nombrado máximo responsable de la justicia en este país. Sí, sí  ... aquello de la zorra y el gallinero.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¡¡¡¡¡¡VERGONZOSO!!!!!

Anónimo dijo...

Es indígnate, o vergonzoso, o repugnante, observar la sensibilidad de los jueces y magistrados de este país. Hoy solo es responsable, el que siempre lo ha sido, “EL MAQUINISTA”. Su imprudencia, sustentada por una total previsión de asunción de riesgos, provocó en su dia, y aun hoy podría provocar, que una situación similar pudiera producirse.
Pero no importa, aquí, el responsable es quien a los mandos del tren, y que tren un Talgo de la Serie 730, hibrido, cuestionado, pero el “MAQUINISTA” es el único responsable, eso quiere decir que cualquiera de nosotros, en el ejercicio de nuestra labor profesional, estamos desamparados, expuestos a sufrir una desgracia y a ser castigado por ello.
Los otros, los Políticos, los Técnicos, los responsables de la señalización y los enclavamientos, estaban de manera lateral a años luz de las desgracias ajenas.
Es indigno pertenecer a una sociedad que como Pilatos deja libres y sin culpa a los verdaderos responsables de la tragedia, aquellos que con su acción o con su omisión, perpetraron la existencia de un error sin un control cierto. Hoy nadie es responsable y se afanan en felicitarse y regodearse de un “FALLO” que debería avergonzar desde el que lo dicto al que lo escribió y plasmo su firma en tal iniquidad.
La irresponsabilidad de la magistratura, posiblemente les pida cuentas, les exija, actuar en justicia, pues ajenos a las normas dictadas por los instancias superiores son capaces de perpetrar una infamia que ahonda el dolor de las víctimas, sus familiares y sobre todo de aquellos que confiábamos en que se hiciera justicia.

Ave valencia Madrid dijo...

Comparto la opinión de mis compañeros, así como felicito por la información, saludos.