06 octubre, 2013

El caos de Fomento: La Ministra debe cesar al secretario de Estado, el presidente de AENA y su jefa de Comunicación


Con un sólo día de diferencia el secretario de Estado de Fomento, Rafael Catalá y el presidente de AENA se han pronunciado sobre el futuro de las tasas aéreas, a las que nos referíamos en nuestro post del otro día "La crisis de Iberia arrastra al abismo a Barajas". Según recoge el digital Madridiario.es, donde uno dijo digo, el otro dijo diego.




El secretario de Estado:
Aena no descarta articular bonificaciones e incentivos en las tasas aeroportuarias del aeropuerto de Madrid-Barajas con el fin de que esta instalación recupere tráficos, según indicó el secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá.

El presidente de AENA:
El presidente de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), José Manuel Vargas, ha manifestado este viernes que el gestor aeroportuario no tiene previsto bajar las tasas antes de 6 o 7 años, momento en que espera haber compensado el déficit tarifario de 250 millones que tiene en este momento.

¿En qué quedamos?
Ministra, no le queda otra que mandar a casa a estos colaboradores, que no son capaces de ponerse de acuerdo en algo que lleva tiempo y tiempo coleando y en el que el subordinado desdice y contradice lo dicho por su jefe. Y de paso, también, a su responsable de comunicación, que a esta hora, no ha dicho, todavía, ni mu. A tanto incompetente, les pagamos todos el sueldo. 

Tampoco parece que van bien las cosas entre los presidentes de RENFE y ADIF, a costa del accidente de Angrois en lo que toca a distintas responsabilidades que señala el juez del caso y que, uno y otro, otro y uno, se echan respectivamente encima, tirando los balones al campo contrario

Otro tanto cabe decir, aunque en este caso el partido se juegue contra un equipo de fuera de casa, del contencioso con las constructoras y aseguradoras por las autopistas radiales, así como por la endeblez de los contratos de mantenimiento de la red vial de autovías, que no se ven compensados suficientemente por las inversiones en las líneas de alta velocidad.

Algunos grupos de presión constructores ya han puesto a trabajar a despachos de lobbies para hacer llegar al presidente y a la clase política, en especial al PP , que esperan obtener algún beneficio en esta nueva época de vacas un poco más gordas que el gobierno afirna que está en ciernes.

Pero, la ministra, hasta ahora se niega a soltar un duro y, es más, les ha pedido dinero a los privados en cuantía de 1.300 millones, lo que hace que algunos empresarios de tronío, junto con destacados barones del Partido popular, se planteen que en remodelación ministerial, prevista para después del segundo aniversario de la llegada al gobierno, esta ministra sea removida a otra cartera, que, no se descarta haga bis en Sanidad, como ya lo hizo con Aznar, en sustitución de una más que chamuscada tocaya Ana Mato.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Se os olvida decir que también están en pie de guerra los autobuseros de la carretera por las bajadas de tarifas del Ave y que piensan plantarle cara al ministerio

Anónimo dijo...

La ministra debe cesar de inmediato a todo el equipo de dirección de Renfe, empezando por el presidente, por la falta de diligencia - rayana en la indolencia - en la resolución de los problemas de la serie 730.
Nada compungidos por el brutal accidente que segó la vida de 79 personas y arruinó la de muchas decenas, los directivos de Renfe siguen sin asumir que la serie 730 es un auténtico bodrio muy poco fiable y bastante peligroso. Se han enrocado en que la seguridad es competencia exclusiva de Adif y que, en todo caso, será el juez quien decida.
Y yo me pregunto: ¿para qué existe un consejo de administración, un presidente y toda una estructura directiva en Renfe? ¿Dónde está la labor de investigación, prevención y mejora continua de su actividad? ¿Piensan que prestan un servicio que ya no se puede mejorar? ¿Qué tipo de moral tiene esta gente? ¿Por qué lo permitimos?
Los hechos siguen estando ahí, día tras día. Ayer por la tarde, domingo 6 de octubre, estaban programados 2 Alvias de la serie 730 entre La Coruña y Madrid. El resultado de la operación ha sido un desastre: el primero llegó a destino 35 minutos tarde por problemas de ERTMS (ojo al peligroso asunto) y el segundo ni siquiera pudo salir de su origen por problemas de tracción. En total, unos 800 viajeros maltratados. La mitad, tuvo que hacer el viaje por carretera.
Incapaces de exigir a Talgo y a Bombardier que arreglen los defectos de mantenimiento de los vehículos de esta serie, los actuales directivos de Renfe pretender escurrir el bulto mientras los hechos les apuntan.

FTF, Foro del Transporte y el Ferrocarril dijo...

Absolutamente de acuerdo con tu comentario. Mucho antes del desgraciado y lamentable accidente de Santiago, mucho antes, cuando se inauguró ese improvisado y nefasto tren, en un post ya le denominamos sarcásticamente como el tren orquesta. Un sucedáneo de tren serio que el fabricante, los fabricantes, tuvieron que improvisar para satisfacer el ego de un irresponsable que se llama José Blanco, ex ministro de Fomento.

Emilio dijo...

Teniendo en cuanta, que las tasas altas, eran debidas única y exclusivamente a lo mucho que cobraban y lo poco que trabajaban los controladores -hay cientos de vídeos, periódicos,etc. que así lo atestiguan- ahora mismo debían de estar por los suelos. Pinocho, mintió, y casi todo el país "quiso creerle" ahora que vayan a reclamar al maestro armero, que les está bien empleado.

Saludos.